El lado oculto de Internet: luz y oscuridad en la deep web

Muchas personas asocian a la deep web (Internet profunda, oculta o invisible) con cosas ilegales. Artículos, noticias y videos de Internet hablan de este lugar como un sitio de actos y productos ilícitos.

De cierta forma, la deep web sigue siendo una parte cuasi segura del universo digital, pues uno de sus objetivos es dar más seguridad a contraseñas y carpetas, las mismas que se encuentran en nubes privadas como Google Drive y Dropbox. No obstante, esto no quiere decir que no contenga contenido ilegal.

No todo lo oculto es oscuro

Antes de empezar, es necesario aclarar una confusión común sobre la deep web, pues hay personas que piensan que ella solo se dedica a cosas ilícitas o peligrosas.

En un principio, la deep web es todo el contenido de Internet que no aparece en buscadores. Los motivos para restringir la visibilidad de este contenido en Internet pueden ser varios, desde evadir personas o grupos indesesados, darle acceso a personas en específico, evitar sanciones, etcétera.

La deep web le da a sus usuarios seguridad y privacidad al navegar en Internet, evitando que sean rastreados por grupos de todo tipo. Esto ayuda especialmente a las personas que están bajo el ojo público o manejan información delicada, como activistas o periodistas. También aquí pueden encontrarse trabajos académicos cuyo acceso es limitado por métodos convencionales.

Dentro de la deep web está lo que se conoce como Internet o web oscura (dark web), que conforma todo el contenido ilícito de la deep web. Entre dicho contenido está la venta de armas y datos confidenciales, grupos y servicios de hacking, financiación y fraude, propaganda terrorista, y más.

Existen diferentes métodos para ocultar contenido en buscadores y llevarlo a la deep web. Algunos son:

• No enlazar páginas para que los buscadores no puedan indexarlas durante el rastreo.
• Usar software para ocultar contenido de manera intencional.
• Proteger contenido con contraseñas.
• Páginas y sitios contextuales, cuya visibilidad varía según la situación (IP del cliente, visitas anteriores...).
• Páginas dinámicas que responden a varias acciones, como llenar un formulario.

Los peligros de la dark web

En lo más profundo del ecosistema digital encontrarás la dark web, la parte turbulenta de la deep web. Aquí, más allá de la privacidad y el anonimato, lo que prevalece es la impunidad.

Es este lugar donde se puede emprender el negocio más turbio sin ninguna restricción, comenzando por ventas de todo tipo: drogas, armas, documentos de identidad, pasaportes, software, hardware, imágenes y videos terroríficos… la web oscura es un sitio donde la ilegalidad no puede dejar rastro.

Como ocurre con la deep web en general, para entrar de lleno en sus rincones más inseguros, es necesario usar navegadores que puedan mantener nuestra identidad anónima, como Tor, Subgraph, I2P, Whonix, Tails y Waterfox. Ellos no solo permiten que ocultemos nuestra identidad, también disminuyen el riesgo de que nuestros equipos y sistemas sean afectados.

Cuando miras al abismo, este te devuelve la mirada

Muchos expertos aconsejan no navegar en la dark web por su carácter anónimo y lo fácil que otros te perjudiquen de forma impune. Este lugar es un nido de criminales, estafadores y piratas, las posibilidades de caer en algún ciberataque, suplantación de identidad o ataques a nuestra seguridad son elevadas.

Muchos sitios web sugieren no descargar archivos de la dark web porque estos podrían tener software malicioso o malware. Aun así, este debería ser el menor de tus problemas al hacer clic en algunas de sus páginas o contenido. Por ejemplo, si entras en el foro equivocado te podrías ver involucrado en alguna actividad ilegal grave.

Las buenas intenciones en la deep web

Como mencionamos antes, no todo es negativo en la deep web. El anonimato permite que se oculten cosas, y no solo actos ilegales o perniciosos, sino también proyectos o causas positivas y beneficiosas.

Todos sabemos que Facebook tiene políticas de censura y toma datos personales, lo que hace que los usuarios desconfiemos. A través de la deep web, podemos entrar en esta red social de forma anónima y sin restricciones. Esto es posible con Onion, un navegador web de código abierto que ofrece a los usuarios una experiencia de navegación absolutamente anónima.

Historias sin rostros

Hoy en día, si das una opinión o cuentas una historia en las redes, podría ser suspendido (baneado) o ser víctima de los ataques personales de algún usuario.

Para evitar este escenario existe una variante en la dark web de SoylentNews, un agregador de noticias de código abierto sostenido por la misma comunidad. Su misión es dar relevancia y visibilidad a estas historias y ser un sitio para debatir sin que tu identidad sea expuesta. Es un lugar adecuado para publicar contenido u opinar sobre temas políticos sin el temor de ser juzgado o censurado.

Héroes sin identidad

Como ya mencionamos, en la deep web no solo existen negocios o contenidos turbios o perniciosos, sino también páginas que aprovechan el anonimato para hacer un mundo mejor o, en el caso de Pro Pública, más informado.

Pro Pública es una agencia de noticias convencional y sin ánimo de lucro que fue pionera en expandirse en la deep web. Ella denuncia abusos de poder y expone casos de corrupción, protegiendo siempre la identidad de sus periodistas.

Una IA alimentada en las sombras

La idea de que una inteligencia artificial esté conectada a la web oscura podría resultar inquietante y preocupante, puesto que es una herramienta que genera terror e intranquilidad en algunas personas. Sin embargo, una IA conectada a la dark web podría ser de utilidad, sobre todo en el ámbito de la criminalística.

Muchos detectives coinciden en que para atrapar a un criminal, hay que pensar como este, y DarkBERT ayuda mucho en esto. Es una IA y modelo de lenguaje (LLM) que accede a los datos de la dark web a través de la red de Tor. La IA ayuda a investigadores y policías monitorear la actividad de los usuarios en foros, detectar sitios web dedicados a la venta de ransomware o de datos confidenciales para atacar así a los cibercriminales.

Políticas de control

Las aguas internacionales y la deep web tienen un punto en común: el vacío legal se extiende al no haber ningún organismo regulador. No obstante, prohibir la existencia de un sitio como este podría suponer un ataque importante a la libertad de expresión.

No olvidemos que sirve de refugio para miles de ONG y periodistas independientes. Un ejemplo es Wikileaks, una plataforma que recurrió a la deep web en 2006 a través de la red de Tor para filtrar documentos secretos del Gobierno de Estados Unidos y también denunciar atropellos a los derechos humanos por parte de varios gobiernos.

El anonimato y la privacidad de la deep web le da a sus usuarios un espacio para hacer cosas tanto buenas como malas. En última instancia, como ocurre con casi o toda tecnología existente, los efectos la deep web son responsabilidad principalmente de las personas que lo habitan y utilizan.

Eso sí, si no tienes un muy buen motivo entre manos, quizás quieras pensar dos o tres veces antes de entrar y pasear en la deep web. Hay mejores sitios para sentirse cómodo y seguro.