La influencia de la comunidad LGBTIQ+ en la tecnología
La tecnología es para todas las personas, entre ellas aquellas con identidades y orientaciones sexuales y de género distintas a las tradicionales. Siendo así, es interesante conocer la relación de la comunidad LGBTIQ+ con el mundo tech si pensamos en cómo la diversidad de consumidores y creadores de tecnología impacta en su desarrollo y evolución.
Hoy hablaremos del rol de los consumidores y trabajadores LGBTIQ+ en el mercado, cómo las compañías apuestan por espacios inclusivos para ellos, qué referentes de éxito en las startups y grandes empresas de tecnología son de esta comunidad, y cómo la tecnología permite que vivamos en un mundo más diverso.
Papel queer en el consumo y mercado laboral
El primer paso para hablar de la influencia de la comunidad en el mundo tech es ver cómo esta influye en la demanda y el mercado laboral en la industria de tecnología.
La razón es que, si bien se sabe que hay un grupo grande de personas de la comunidad dentro de los consumidores de tecnología y los trabajadores de dichas empresas, es a través de la demanda (soportada en datos tangibles) que estas empresas ven las necesidades de sus consumidores, la rentabilidad y la búsqueda de alternativas para mejorar su forma de apoyar la diversidad.
Podríamos empezar por la rainbow economy o la "economía rosa", el mercado o sector específico de las personas LGBTIQ+ en la economía. Este sector movió 3.6 billones de USD en el mundo en el año 2018. De ese total, aproximadamente US$ 253,000 millones fue lo que movió la comunidad en Latinoamérica, aproximadamente el PBI de países como Perú o Vietnam.
Por otro lado, según una investigación de McKinsey, una consultora estratégica global dedicada a resolver problemas en la administración estratégica, las empresas con mayor diversidad entre sus empleados cuentan con un mejor rendimiento que el resto: tienen un 25% más de probabilidades de registrar un desempeño superior a la media.
Espacios seguros en las empresas tecnológicas
También es importante revisar la cuestión de los entornos seguros para los miembros de la comunidad LGBTIQ+ en las empresas de tecnología para así entender qué tanto estos espacios les permiten trabajar de manera cómoda.
Para entrar en el tema tenemos el informe de la UGT, la Unión General de Trabajadoras y Trabajadores de España, que señala que alrededor del 40% de las personas de esta comunidad esconde su orientación sexual en sus espacios de trabajo. El mismo informe indica que el 44% de las personas considera que su productividad aumenta después de "salir del armario".
Con el dato anterior tenemos una base para destacar la importancia que juegan los espacios de trabajo inclusivos en las empresas. Enfocándonos ahora en tech, veamos ejemplos que muestran cómo las grandes empresas del sector van impulsando cada vez más espacios de igualdad y pro a la diversidad.
Microsoft
La empresa de Bill Gates tiene una excelente calificación en el Índice de Igualdad Corporativa de Human Rights Campaign (HRC), que verifica las políticas y prácticas corporativas relacionadas con los empleados y las empleadas lesbianas, gais, bisexuales, transgénero y queer.
Meta
Meta, por su lado, es una empresa que constantemente está mostrando su apoyo abierto a la comunidad.
Un buen ejemplo de esto es que con el apoyo de la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (FELGTB), COLEGAS (Confederación LGBT Española) y Fundación Triángulo, lanzó la guía Acaba con el acoso a la comunidad LGTB. Sé respetuoso en Internet, dirigida al colectivo LGTBIQ+, con un enfoque especial a los más jóvenes, para brindarle ayuda ante situaciones de acoso y discriminación por orientación sexual o identidad de género.
Meta también se mantiene en constante actualización y revisión en materia de acoso y cyberbullying, manteniéndose siempre en asesoramiento. Para esto, piden ayuda de instituciones como el Centro de Inteligencia Emocional de Yale para entender mejor el acoso e intimidación en línea.
Google también es un buen ejemplo de cómo las grandes empresas pueden brindar espacios seguros para todos sus trabajadores, desde apoyar públicamente el matrimonio igualitario en 2010 a ser pionero en brindar beneficios de atención médica para personas transgéneros, cubriendo los procedimientos y tratamientos de transición.
En 2019, por primera vez, Google incluyó datos sobre la representación de empleados que optaron por identificarse a sí mismos como LGBTQ+, así como géneros no binarios, etc.
Conectar con otros en Internet y sentirse seguro
Desde hace unos años hasta ahora, Internet se ha convertido en el principal sitio para compartir con otras personas en el mundo e ir más allá de nuestro entorno. Para las personas LGBTIQ+, Internet ha sido un espacio que les ha ayudado a conocer personas de la comunidad, sentirse libres, y estar en contacto con causas sociales.
En 2007, unos investigadores australianos realizaron uno de los primeros estudios sobre cómo las comunidades de Internet sirven de espacios seguros para los jóvenes LGBTQ que se enfrentan a entornos hostiles en casa. Sus encuestas a 958 jóvenes de entre 14 y 21 años revelaron que el anonimato y la falta de límites geográficos de los espacios digitales ayudan a salir del armario, participar en una cultura gay comunitaria, experimentar con la intimidad no heterosexual y socializar con otros jóvenes LGBTQ.
Por último, un informe de 2013 de la Gay, Lesbian & Straight Education Network, en el que se encuestó a 1.960 jóvenes LGBTQ de entre 13 y 18 años, reveló que el 77% había participado en una comunidad en línea de apoyo a una causa social. Mientras que el 68% de los jóvenes LGBTQ también se ofreció como voluntario en persona, el 22% dijo que solo se sentía cómodo participando en línea o a través de mensajes de texto.
Miembros de la comunidad como referentes
Ya conociendo cómo algunas empresas generan un espacio seguro para sus trabajadores, también es válido plantearse que, como parte de un ambiente seguro para la comunidad, también está el contar con referentes de éxito en posiciones importantes dentro de las grandes empresas del mundo tecnológico.
Veamos una lista de miembros de la comunidad que han jugado un papel clave en el desarrollo de la tecnología a nivel mundial.
- Arlan Hamilton, cofundadora y CEO de Backstage Capital (mujer homosexual).
- Joel Simkhai, fundador de Grindr (hombre homosexual).
- Megan Smith, antigua jefa de tecnología de los Estados Unidos (mujer homosexual).
- Tim Cook, gerente general de Apple (hombre homosexual).
- Leanne Pittsford, fundadora y CEO de Lesbians Who Tech (mujer homosexual).
- Martine Rothblatt, fundadora de Sirius XM y United Therapeutics (mujer transgénero).
- Alex Schultz, director de marketing y vicepresidente de análisis de Meta (hombre homosexual).
Entonces, ¿cuál es la influencia?
Con toda esta información, nos podemos ir dando cuenta el papel genuino de la comunidad LGBTIQ+ en el mundo tech.
Si bien hay que destacar que esta publicación busca visibilizar los avances y el impacto positivo que ha tenido la tecnología en la comunidad, no podemos ignorar los problemas que la tecnología genera en ella. Males como el ciberbullying, el queerbating, el acoso cibernético y en general la discriminación y el odio traducidos en homofobia, transfobia, bifobia, etc., no son realidades externas a este mundo.
Pero fuera de todo eso, es importante dar cuenta del poder que hoy tiene la comunidad y los avances de las grandes compañías cada día en materia de diversidad. Los actuales cambios y esfuerzos que se realizan desde el mundo tech para construir una mejor sociedad más inclusiva se traducirán en referentes para que, en el futuro, las nuevas empresas entiendan que la inclusión y el respeto son la principal política que deben considerar.
Este artículo busca ser una pequeña recopilación de datos que brinden esperanza a todo lector miembro de la comunidad LGBTIQ+ y que a su vez aspira a formar parte del mundo de la tecnología e innovación.
El mundo inevitablemente está cambiando, y ese cambio viene con cosas positivas que se traducirán en espacios donde cualquier persona con ambición, sin importar sus orígenes, orientación sexual, identidad o expresión de género, sea capaz de lograr sus objetivos.
Por un mundo de comunidades cada vez más diversas.